CORTE SUPREMA DE JUSTICIA

Palabras iniciales
§ I. Introducción
§ II. Frutos de la obra y asalto de causas
§ III. Conformación de la Corte Suprema de Justicia de la Nación
III. 1. Criterios de selección y cantidad de integrantes
111.2. Acerca de la estabilidad de los jueces de la Corte Suprema
111.3. La tarea del Más Alto Tribunal. "Prohibido dividirse en salas"
§ IV. Competencias de la Corte Suprema de Justicia de la Nación
IV. 1. Entreacto. Sin "causa" formada a pedido de parte, no hay jurisdicción
IV.2. La función de decidir o dirimir conflictos en instancia originaria
IV.2.A. Entreacto: un problema insoslayable: la cuestión de las prórrogas de jurisdicción a favor de tribunales extranjeros en materia de deuda pública
IV.3. La función de dirimir conflictos en instancia apelada extraordinaria
IV.3.A. Control de constitucionalidad
IV.3.B. Propuesta y recomendación sobre el recurso extraordinario federal
IV.3.C. Análisis y eventual reformulación del sistema de desestimación in limine. En la búsqueda del "certiorari patrio"
IV.3.D. Arbitrariedad de sentencia y Tribunal federal de garantías
IV.3.E. Definición del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires como alzada respecto de la aplicación del Derecho común por la justicia nacional
IV.4. El funeral del recurso ordinario federal, en sede judicial
IV.5. Cuestiones comunes
IV.5.A. Agenda de causas
IV.5.B. Explicitación de las decisiones. El tiempo de las causas en la Corte
IV.5.C. Autoridad del precedente
IV.5.D. Amigos del tribunal
IV.5.E. Declaración de inconstitucionalidad de oficio
IV.5.F. Audiencias pública
IV.5.G. Comunicación y publicidad
§ V. Comentarios finales
§ VI. Fuentes
Anexo: Decretto 635/2020

Este texto reúne la ponencia presentada en el Consejo Consultivo para el Fortalecimiento del Poder Judicial y del Ministerio Público, creado por el Decreto 635, del 29/7/2020.

Agradezco los comentarios de Francisco Manuel Balbín, Mario F. Cámpora, Juan Ignacio Ferreyra, Diego Alberto Dolabjlan, Leandro Eduardo Ferreyra y Enrique Javier Morales. Asimismo, a E. Raúl Zaffaroni por el diálogo constante y la genuina iniciativa para que estas ideas sean publicadas.

Expreso mi reconocimiento a Ediar en la persona de Alejo Álvarez. A Pablo Ali, por la tarea que comportó la edición y el cuidado de este libro, y a Javier F. Luna, por la diagramación.

Todas las comunidades humanas poseen una ordenación y una lengua escrita. El cultivo de ambas Incita pensamientos sobre su desarrollo y su cambio, siempre con la guía de sus respectivos protocolos. La lengua de la constitución debe servir para mejorar la coexistencia en paz con justicia social. Ese es mi camino.

Raúl Gustavo Ferreyra
3 de octubre del 2020