Bajo la consigna "libre valoración de la prueba" son discutidos problemas que se mueven en (al menos) tres planos diferentes. Se debe distinguir, primero, el nivel analítico, que describe el proceso cognitivo de la valoración de la prueba y que intenta abarcar los limites de la posibilidad de una decisión correcta; segundo, el nivel de la norma de determinación para el juez cognoscente, en el cual aquello de lo que se trata es las reglas que debe acatar el tribunal para aproximarse a una sentencia correcta, y finalmente, en tercer lugar, el nivel de la distribución de competencias entre el juez cognoscente y el tribunal del recurso, en el que se trata del control de la corrección (o bien, la incorrección) de la valoración de la prueba.