Esta obra nos adentra en una de las mayores crisis de la Historia de España. Carlos Canales analiza cómo el conflicto arruinó la economía y destruyó gran parte de las infraestructuras heredadas de la Ilustración, pero también cómo vio la luz la Constitución Liberal de 1812, considerada el nacimiento de la España Moderna.
Los seis años que transcurren entre 1808 y 1814 se encuentran entre los más importantes de nuestra historia, ya que de ellos, para lo bueno y para lo malo, nació la España contemporánea. Para nuestra nación, que tras el alzamiento de 1808 jugó un honroso papel en el conflicto europeo, en el que dio alas y alento la resistencia en Europa entera, la guerra fue un terrible desastre. Probablemente, si las cosas hubiesen sido de otra manera, las reformas que debian conducir a España a la modernidad se habrian ido imponiendo de una forma u otra, pues aunque es seguro que habria habido una enorme resistencia de los sectores más inmovilistas, también es verdad que poco a poco las ideas ilustradas iban calando en una burguesia, toda via debil, pero cada vez más pujante.
La guerra acelero el proceso, por lo que es importante destacar la revo-lución interior sufrida por España durante estos años que vieron nacer nuestra primera Constitución y el comienzo al fin del Antiguo Régimen y condicionó las decadas siguientes, al no lograrse un acuerdo efectivo que satisficiera a todos los poderes enfren-tados y que impulsó un conflicto entre los legitimistas monárquicos y los libe rales o constitucionalistas que duraria con diversas formas la mayor parte del siglo XIX.