La presente obra refleja el cambio de paradigma actual que sufren la mayoría de los sistemas constitucionales, incluyendo el nuestro. Dicho cambio, se sustenta en la eliminación de cualquier restricción jerárquica y jurisdiccional por parte de los Estados en materia de derechos humanos, puesto que éstos se han venido a posicionar como factores de primacía y universalidad en cualquier parte del mundo.
El bloque de constitucionalidad, así como la vinculación efectiva de las resoluciones de los Tribunales Internacionales, han evidenciado la supremacía de los derechos humanos, permitiendo una mayor y efectiva apertura sustancial y sostenida, en el marco del reconocimiento y protección de los derechos para todas las personas.
