La inteligencia gubernamental es un recurso valioso y necesario para la supervivencia del Estado mexicano. Esto es claro puesto que ningún país del planeta podría existir sin ella. Por ello, toda nación debe diseñar un sistema capaz de proteger su seguridad nacional.
En ese contexto, la obra que tiene en sus manos ahora el lector es un libro de inteligencia gubernamental y seguridad nacional que aborda desde diversos ámbitos del conocimiento: derecho penal, ciencia política, relaciones internacionales y seguridad pública, temas que inciden en la seguridad nacional como la política criminal y la política de seguridad nacional, la contrainteligencia, las amenazas y riesgos a la seguridad nacional, la reserva que rige en la materia, los delitos contra la seguridad de la nación, el papel que desempeña el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita y el terrorismo en la seguridad nacional, la corrupción, la delincuencia organizada, las figuras jurídicas del arraigo, la extinción de dominio y la delincuencia organizada de Estado.
Parto de una inquietante premisa: México vive una evidente crisis en materia de seguridad propiciada por los que, a mi parecer, son los más íntimos enemigos del Estado, me refiero a los servidores públicos cooptados por la delincuencia organizada, aquellos que a cambio de dádivas dejan actuar en la impunidad y sin obstáculo a la delincuencia hasta formar parte de ella en el más alto nivel del gobierno.
Ante ese escenario, en esta obra propongo la implementación de una Unidad de Inteligencia Anticorrupción que coadyuve a combatir a la delincuencia organizada y a la corrupción en nuestro país con pleno respeto a los derechos humanos.
